I Maratón de Coruña

Mucha suerte para toda la expedición Astur en La Coruña, sobre todo a Juan y todos los debutantes, y que todos consigais vuestros objetivos... Triki ansioso ver las fotos de tu llegada jeje, a por todas campeón! Y a tantos que correreis el 10000, que seguro que es propicio para grandes marcas. El tiempo no pinta muy soleado pero seguro que la lluvia será un acicate más que un obstáculo, a por todas!

Muchísima suerte a todos y disfrutdla a tope. Ya nos contareis

Algunos de los asturianos en la coruña esta mañana:
Paco Enlace 3h 13´ 05"
Servando 2h 53´ 09"
Tramoxago 3h 46´36"
Saltapraos 2h 51´ 50"
GCortes 3h 15´46"
Cascayo?? 2h 54´ 26"
Triki?? 3h 34 53"

Efectivamente Sr. Pulasky tiene Vd. buen ojo. Tiempo real 3h 34' 32" q me dejan contento. Todavia por tierras gallegas dejo la cronica para manana.
Mi enhorabuena para todos.

Enhorabuena a todos por esas pedazo marcas,grandes

Esta mañana en la Coruña no solo hubo que luchar contra los kms, los elementos metodológicos fueron un factor muy importante esta mañana, sois todos unos héroes por terminar un maraton es esas condiciones, vientos huracanados que te hacían en el paseo de riazor venían rachas de vientos que en vez de avanzar nos retrocedían, la cuesta de riazor yo la tuve que subir inclinado para adelante jajajajaj casi no la subo, asi que me imagino los que hicieron el maraton lo que tuvieron que sufrir hoy, no solo me lo imagino pues cuando termine mi carrera me duche y me fui a verlos correr y sufrir, agua granizo y mucho mucho viento asi que vuelvo a repetiros que sois unos heroes.

Los tiempazos de jose o de servan pues están solo al alcance de unos pocos, felicidades a todos, a paco a navarro y a tramoxago muchas felicidades por terminar vuestro primer maraton encima con este tiempo de perros y a triki también felicidades, no sabia que ibas a correr y cuando te vi dar la vuelta a la esquina ya desde lejos reconocí tu forma de correr jajajajajajaj no se pueden tener secretos en este foro jajajajajajajajaj felicidades a todos.
Yo por mi parte corri el 10000 con los mismos elementos en contra y aun asi hice mi mejor marca en la distancia asi que mas feliz que una perdiz.
Saludos correnderos

Hoy "volamos" en A Coruña,pero bueno nos podia pasar y nos paso.Es 1 de las 3 peores maratones q corri en mi vida climatologicamente hablando.
El circuito es casi llano...casiii y mencion especial (Como siempre) a los voluntarios,entre otros mi hija de 8 años junto con mis 3 ahijadas de A Coruña...km 35...Ahi cogi yo las fuerzas para el remate final.
Por mi parte me senti una marioneta del viento y me deje ir,no quedaba otra.Aun asi y todo logre practicamente doblar el tiempo de la media.
Varias maquinas del foro cortaron el viento con su increible fuerza.
¡¡¡Felicidades a todos!!!Hoy si q nos ganamos el titulo de maratonistas

Sois unos héroes por acabar una maratón en una s condiciones así, y sin embargo todos hicisteis unos carrerones, y también los del 10K eh!! Asi que mi respeto y admiración, enhorabuena campeones!

Felicidades a todos menudos maquinas luchando contra las inclemencias.

Jorge no sabía que los que corristeis a parte de maquinas fuerais tan afines a la filosofía, tiene que tener su cosa estar corriendo, luchando contra el viento e ir dándole vueltas a los "elementos metodológicos" , pero bueno como decían en airbag lo importante es el metodo.

Mucho nos acordamos de vosotros ayer mientras corríamos por Gijón.

Por lo que veo ni el clima ha podido con vosotros y ha sido una maraton dulce ¿O mejor dicho "de agua dulce"?

Enhorabuena a todos. Por acabarla. Po esos buenos tiempos. Y sobre todo por disfrutarla

Pues ya pasó el Maratón de A Coruña... bueno ya pasó o ya voló porque con el aire que hizo...
Carrera dura la que tuvimos no por el perfil, pero si por las condiciones: frio, agua, granizo y sobre todo un viento enorme que a mi me daba la sensación de que fue siempre en contra.

Había preparado durante todo el invierno a conciencia el maratón siguiendo el plan que usé el año pasado para el Maranalón... pero esta vez lo hice mejor, más metódico, sin lesiones de por medio, haciendo más y mejores tiradas largas y con 3kg menos de peso. Aún así con mis dudas, quería rondar las 3h30.

En la salida, con frio, me encuentro con foreros habituales, charla y cada uno a correr según sus objetivos. Tenía pensado ir a ritmo de 5´aprox y aguantar hasta que se pudiera, de forma que si iba arañando algún segundo cada km los compensaría al final. Y así fue... hasta el km 28 todos por debajo de 5´salvo el 15 y el 27 que se fueron a 5´03 y 5´02. Todo iba según lo previsto.
El inicio de la tercera vuelta con la subida hacia la Torre de Hércules, notó que las fuerzas no son iguales y que el viento no amainaba... me entra el canguelo pensando en el temido muro del 30 y me pongo reservón, desde el 29 hasta 38 marco ritmos entre 5´03 y 5´15, me mantengo pero veo que se me escapa ser sub 3h30. Me animo, pensando que mejoraré la marca del Maranalón... El 39,40 y 41 sufro a ritmos de 5´25 las rodillas me duelen y tengo ganas de acabar... pero pienso en lo que ya llevo y empiezo a saborear ya el segundo maratón. El último Km lo disfruto a tope con gente animando... y al fondo en la rotonda veo y oigo los ánimos de David y de su mujer, de Paco, de Servando y demás Chanwas... me dan el último empujón... enfilo La Puerta Real y veo la meta... busco a María y a Adrián para darles un beso (cuantos ratos les quité para preparar esta carrera) y entro en meta levantando los brazo y pegando un grito... En meta estaba Trankos haciendo fotos... nos damos un abrazo... y ya está... el segundo maratón esta hecho. No fue en 3h30´ , me quedé el 3h34´32" , mejorando 10 minutos la marca del Maranalón del año pasado. No se si la hay pero soy...sub 3h35... La marca me dejó contento pero a medida que pasó el día vi que no sufrí tantísimo y que hoy era el día para bajar de las 3h30... me queda la duda de si podía haber hecho más, de si reservé más de la cuenta en algún km... pero el viento no me dejó muchas más opciones... así que lo doy por bueno.
Por cierto en meta también estaba Rodrigo... lo siento ni te vi... y no te pude saludar.
Como resumen diré que he disfrutado este Maratón, mejoras? claro como todo... pero recomendable. Mi enhorabuena a la organización y a los voluntarios.
Mi enhorabuena también para todos por haber terminado en circunstancias tan adversas, pero sobre todo a Servando y a José Luis Saltapraos por la exhibición, y a Juan Tramoxago por su debut. También quiero dejar constancia de dos corredores que vi llegar... dos horas después de mi... en 5h27 y 5h47... diluviando, solos sin nadie esperándoles, después de casi 6 horas de esfuerzo, sin un aplauso que reconociera aunque fuera mínimamente su éxito... porque ellos también han tenido éxito... Mi reconocimiento.
Ánimo y piernas.

Felicidades Triki, gran carrera y gran crónica! Y la llegada, viendo las preciosas fotos de Rodrigo y Miguel, emotiva como tú sabes eh!
Tal como lo cuentas diría que hiciste todo lo que estuvo en tu mano, simplemente el viento y las malas condiciones metereológicas te fueron robando segundillos km a km que luego son imposibles de recuperar en una maratón, así que sientete muy orgulloso y con la motivación de que para la próxima tienes el sub3:30 en tus piernas!

Felicidades carrerón que te marcaste, y no le des más vueltas a la cabeza, a lo mejor si no hubieras sido reservón hubieras petado y hubieras hecho mucho peor marca. Puede que fuera el día para hacer sub 3:30 pero la meteorología condicionó mucho. Ya llegará esa marca otro día no te preocupes.

Enhorabuena a todos, ya es difícil luchar contra el maratón para encima tener que luchar contra los elementos.
Triki muy buena carrera, diste un gran paso respecto al Maranalón y con muy malas condiciones climatológicas. Tienes en las piernas ese sub 3:30 fijo. Seguro que ya estás pensando en el próximo y ahí cae.

Felicidades triki. Enhorabuena y me alegro mucho por ti. A descansar y recuperarse.

Felicidades Triki.
Me acuerdo cuando te vi corriendo tu primera maratón (Maranalón), yo fui el que te reconoció del foro y que corrí unos metros contigo, y mírate ahora, con tu segunda maratón. (y las que te quedan)

Enhorabuena grande !!!

Muchas gracias a todos compañeros!!!!

Carlos, qué sorpresa!!!! así que por fin apareciste... ahora ya directamente si te puedo dar las gracias, porque en el Maranalón del año pasado me acompañaste en uno de los momentos más críticos, creo que fue a unos 3 ó 4 km de meta... y si no es por ti me tiro al rio... Mucha suerte en tu debut (creo? algo lei en otro post) en Mapoma... a ver si coincidimos en una carrera y nos saludamos.

Ánimo y piernas!

Triki... acabo de ver las fotos de la llegada. Con estas y las de Maranalón creo que tienes el mejor book para ser el protagonista de un reportaje llamado "¿POR QUÉ MERECE LA PENA CORRER UNA MARATÓN?".... IMPRESIONANTES

Otro que se animó con la maratón, en este caso como me quedaba cerquita de casa fue lo que me decidió a apuntarme, no está mal después de 54 medias maratones.
Después de una preparación con dudas, ya que tuve una sobrecarga en el gemelo un mes antes, llegó el día del debut.
La climatología ya sabiamos que iba a ser mala, así que me decido a ser conservador la 1ª parte de la carrera, en las zonas que pegaba el viento (unas cuantas, ya que corría paralela a la costa en grandes tramos) se me iban los Kms, por encima de 4´30. Así que llego a la media en 1h34´07, bastante más de 1 minuto sobre lo previsto, así que poco a poco voy aumentando el ritmo sobre todo a partir del 29, que empiezo a marcarlos a 4´10, yo super sorprendido, (¿donde estará el sr. del mazo?), entre el 34 y 36 los marco casi a 4´ voy eufórico adelantando corredores, asi que me sereno y me freno y vuelvo a los 4´10, pero entre el 39 y el 40 y pico que nos daba el aire de frente se me va a 4´35, pero en cuanto paso por el 42, me digo a darlo todo y aunque lo intento ya no estoy tan fresco. Ultimo Km. a 4.10 y entrando en la plaza de Maria Pita sonriendo para un tiempo neto de 3h06´29. La 2ª Media minuto y medio más rápida.
En resumen, sabor agridulce, ya que apenas sufrí, acabando muy entero por haberme reservado, pero también es la mejor forma de debutar en Maratón con la sensación de poder mejorar en posteriores maratones.

Menuda manera de debutar, enhorabuena, sin duda mejoraras porque acabaste entero, y seguro que en siguientes maratones hará mejor tiempo.

Bueno,una pregunta para todos los que habeis disfrutado de esta primera adicion;¿que tal ha sido?Precio,organizacion,publico,recorrido,bolsa,...

Como todavía no había escrito mi crónica,aprovecho para escribirla y responderte a esas preguntas.
El tema del precio, para mí, era la primera. Pero creo que apuntandose dentro del primer plazo eran 25€, que es de las mas baratas que se pueden encontrar.
Sobre la organización: Aunque para las inscripciones usaron un método un poco rudimentario para la época, pues te inscribias y no sabias si estabas inscrito hasta días mas tarde, y luego figuraba gente sin pagar que habia pagado y al revés. Luego en carrera, yo creo que la organización no tuvo queja. La salida se hizo muy bien, los avituallamientos como habian dicho,con isotónicos,fruta y agua. En algunos sitios tenían que dar paso a los coches, ya que sino Coruña quedaría colapsada, pero procuraban no molestar a los corredores. Según la gente tiraba las botellas y vasos, había gente recogiendolas. Este tema,creo que podemos dejarlo en notable alto.
El recorrido, a mi parecer, era guapo. Otra cosa es que el tiempo lo hiciese duro, ya que en las dos rotondas que haciamos en el paseo de la playa,te tiraba hacia atrás. Eran tres vueltas a un mismo circuito,cosa que a mi me asustaba, ya que le tenía miedo, cuando menos a la última vuelta, pero luego en carrera la verdad que no me molestó ni lo más mínimo. Como anécdota en el km 28, segunda vuelta, me encontré a la familia, les pregunte si podia parar, y todos contestaron a la vez que "nooo", con lo cual se acabo el problema y no me quedo mas remedio que seguir corriendo. Recorrido, con un clima favorable, nota de 9.
La bolsa, la verdad que para un maratón era un poco pobre. Una camiseta técnica, que luciremos con orgullo por ser la primera de maratón. Una revista atrasada, folletos y no se si algún gel de descanso, pero bueno, es lo que hay, y puede que de otras carreras mas modestas vengamos mal acostumbrados.
El público y voluntarios de carrera, la verdad que con el día que hacía no se les puede pedir mas. Había zonas en las que no había mucho público,pero el que había animaba a todos. Tenemos que decir que los asturianos jugamos con ventaja,pues llevamos mucho público de casa.

Mi experiencia personal de 9,5. Le tenía bastante miedo a la carrera y a la preparación. Raro es el periodo de tiempo que puedo correr 4 meses seguidos sin tener alguna avería, pero las patucas me respetaron y estos últimos meses se portaron muy bien. Los Chanwas empezamos de coña con lo del viaje y contratar un bus para poder ir todos juntos, deciamos " a ver si juntamos gente para un micro", y al final nos marchamos un bus lleno con 54 plazas y gente que nos tuvo que acompañar en coche. Yo llevaba mujer, hijos, hermano, cuñada, sobrino, primo y un montón de amigos, algunos confiaban en que podría con ello,otros dudaban de que pudiese, todos ellos me motivaban. Al final, la motivación de no poder fallarles, y el recuerdo en la cabeza de la entrada en el último Maranalón de gente como Triki, Charlie o Jorge por citar a algunos, me hicieron salir mentalizado de que tenía que llegar,yo también queria sentir eso.
En carrera el cruzarme con todos los conocidos que me crucé, hizo que la cosa se me fuese pasando rapidísimo. Servan y su grupo, que fueron los mas fotogénicos de la carrera, Paco, al acecho, G.Cortes, Juan Antonio, Navarro, Los Chanwas, Los del GRASIAS, Los PAULINOS, Lorenzo Moro etc....y fijarme en los conocidos del público, hacían que los km fuesen cayendo. Del 28 en adelante, aunque creo que esquive al hombre del mazo, un dolor en el pie derecho y los cuadriceps que empezaban a ponerse duros, hicieron que mi ritmo bajase, pero sabia que tenía que llegar y seguir disfrutando. Antes del km 41, primer subidón con los ánimos de Jorge (Palanquinos).KM casi 41 creo que era, escucho a Chanwito la voz de "ese Chanwa" y la maquinaria empezó a funcionar como si estuviese en el km2, pasillo de gente, mogollón de caras conocidas con una sonrisa de oreja a oreja y ofreciendo las manos para chocarselas. Impresionante, no sentía las piernas pero ese tramo de carrera me entro la sensación de que iba atómico, un poco mas adelante, familia y Paco Enlaze, Servan, Leticia, David, Luis Zamora y esposa... no puede ser, esto se acaba. Tres meses pensando que no voy a llegar, y ahora pensando que se me acaba sin saborearlo del todo. Bueno habrá que repetir una próxima para ver si se siente lo mismo. El 0,5 que falta para el 10, es como consecuencia de que, mi pie sigue doliendo. El fisio dijo que era inflamación del peroneo, pero con un masajuco y reposo hasta el lunes se quitará. Daños colaterales con los que ya contabamos. Ya puedo decir que corrí un maraton.

Enhorabuena por el logro tramoxago,y muchas gracias por responder tan ampliamente a las preguntas

Buenas compañeros hace meses que no entro por el foro y hoy entre y me encuentro con la gran cronica de Triki y la de Tramoxago para mi Juanin y que os puedo contar que cuando lo leo me salen unas gotas por la cara deben ser lagrimas se lo que le costo.decidirse y todo lo que entreno. y fuy muy feliz cuando con esa cara de risa paso a nuestro lado kmt 42'100, Juan lo conseguiste.
Todos lo conseguimos mas me gusto el circuito eso si terminar esta maraton con este temporal tiene mas merito..
Nos vemos en la siguiente y prometo entrar mas amenudo por aqui.

Crónica de mi maratón en Coruña. 15 de abril de 2.012, Versión larga (solo para los más cafeteros).

De Barcelona a Coruña , sin pasar por Berlín.

Hace unos 13 meses escribía en el Foro de Correr Asturias mi experiencia en la Maratón de Barcelona, mi primera maratón. Hoy, al releerla, se me cayeron algunas lágrimas, tal como os pasó a varios de vosotros cuando la colgué el año pasado, según me reconocísteis después. Esto de las lágrimas, al igual que mis primeros síntomas de resfriado, deben ser efectos secundarios por esa falta de defensas que se produce después de un esfuerzo como el de una maratón. Debo de estar más vulnerable a todo estos días; también a las emociones. Esta nueva crónica no tendrá la carga emotiva de la de Barcelona, porque apenas hubo motivo para ello. Será más descriptiva y técnica.
El relato de la maratón en Barcelona empezaba así:


“A VECES LOS SUEÑOS SE CUMPLEN…

Maratón de Barcelona, 6 de marzo de 2011

De repente, mientras hacíamos tiempo mi mujer y yo en el aeropuerto de Barcelona para coger el avión de vuelta a Asturias, nos sorprendió Chus (Pulasky), que estaba acompañado por su señora e hijo, con algo así como “te voy a meter una patada en el culo que te vas a enterar, todo el día quejándote y luego haces esa carrera”. Y comprendí que tenía sus razones. Me sentí en ese momento como uno de esos odiosos estudiantes que en nuestros tiempos de juventud andaban llorando por las esquinas en vísperas de exámenes porque daban por hecho que iban a suspender y, al final, acababan sacando una nota brillante.

Estos días no escribí la crónica porque andaba muy atareado, pero es cierto que según van pasando las horas, los días y esos primeros momentos de euforia, vas analizando poco a poco cada detalle de la carrera, y os puedo asegurar que no entendí entonces y sigo sin entender ahora la bondad de mi registro. Y menos aún comprendo el asombroso estado físico con el que terminé la prueba. Tan solo hay un dato objetivo y cierto en todo esto, y éste es el resultado final: 3h 07’ 31”.

(el resto de la crónica está en el siguiente enlace)

https://correrasturias.all-up.com/t850p240-xxxiii-marato-de-barcelona-06-03-11?highlight=MiGuEl

Enlazo con mi anterior maratón porque encuentro numerosas similitudes con esta de Coruña. Entre estas dos carreras, como muchos sabéis, preparé la maratón de Berlín, para la que ya tenía pagado dorsal, viaje y estancia, y al final se me truncó por culpa de una lesión generalizada en el glúteo derecho, que me mantuvo apartado de toda actividad durante tres interminables meses.
Tras ellos, hubo un duro regreso. Aunque al final, por el resultado del domingo parece que no haya sido así, para mí fue como empezar de cero. Solo quien haya pasado por ello sabe a qué me refiero. Pasas de tener la sensación de que vuelas a arrastrarte como un lento reptil. La impotencia por no poder volver a ser el que eras se hace muchas veces insoportable. Y, además, durante todo este tiempo de recuperación hasta hoy tuve que pasar por varias lesiones más. Sin ir más lejos, durante estos dos últimos meses estuve parado dos semanas alternativas y dos simultaneas, lo que me hizo ir preparándome para una nueva decepción como la de Berlín.

El pasado sábado, día previo a la prueba, no daba un duro por mí. Amanecí con un dolor en el pie derecho que me había acompañado desde la semana antes a la media maratón de Siero, celebrada el 4 de marzo. Últimamente había tenido molestias en ese pie, pero no el dolor con el que salí a hacer el ligero entrenamiento de 8 km de carrera continua más 10 simples progresiones que el míster me había marcado para ese día. Tras el breve entrenamiento, y mientras me preparaba para salir hacia Coruña, mi decepción y preocupación iban en aumento. A pesar del antiinflamatorio y del hielo que le puse, el dolor no remitía. Traté durante el resto del día de no cargar demasiado el peso sobre ese pie. Me pasé toda esa tarde sentado, salvo el rato que estuve en el Exporunning. Previamente a la cena me tomé otro antiinflamatorio, y justo antes de dormir me masajeé el pie con una crema también antiinflamatoria. La esperanza de recuperarme en tan solo unas pocas horas de lo que no había conseguido recuperarme en mes y medio era evidentemente nula.

Y amaneció el domingo. Tras una semana durmiendo poco por culpa de los nervios, esa noche, en la que ya me había mentalizado para lo que tuviera que pasar, al menos pude dormir desde las 23:00 hasta las 5:30h, hora a la que había puesto el despertador. Me extrañó que al ponerme con mucho cuidado en pie no sentí nada. Seguí dando unos pasos, y nada. Todavía con la oscuridad de la habitación, tenía la impresión de estar esperando a que de algún lado me fueran a dar una bofetada que no acababa de llegar. Empecé a hacer, con la mayor suavidad que me era posible, los 20 minutos de estiramientos que tras levantarme hago a diario desde que empecé hace algo más de 3 años con esto del running, y seguía sin sentir la molestia que me acompañaba desde hacía 6 semanas. Me vestí, a las 6:00 me fui a desayunar al buffet del hotel, y ya por los pasillos a paso más ligero trataba de descubrir qué había sido de esa dolencia, pero continuaba sin notar nada. Tras desayunar, regresé a la habitación y fui repasando todo el protocolo de alimentación, hidratación, indumentaria, etc, que había programado durante la última semana. Al salir del hotel, que estaba a un kilómetro de la salida de la maratón, tendría la penúltima prueba. Empecé a trotar lentamente y me seguía asombrando porque, por lo que parecía, aquel dolor se había esfumado. Durante la carrera, no tuve ni siquiera una leve molestia. Inexplicable.

Aparte de este dolor, tuve hasta ese mismo sábado la preocupación de que la rodilla derecha (todos mis males los tengo en la pierna derecha) era incapaz de soportar mi peso ni siquiera durante unos pocos kilómetros, lo que me provocaba un dolor importante que me tuvo ocupado con aplicaciones de hielo en la zona de 3 a 4 veces al día durante el último mes. Esto ya había pasado a ser una pesada rutina. Además, las sensaciones no eran nada buenas; las pulsaciones eran demasiado altas. Las 4 semanas que acumulé de parón en esos 2 últimos meses no me daban margen para la mejora.

En esa última semana, como ya hiciera en Barcelona, seguí algunos de los métodos descritos por Manuel Nájera (Pata Liebre) en la Maranalón de hace un par de años. Volví a repasar concienzudamente sus consejos y los puse por segunda vez en práctica. Entre otros, el tomar después de cada entrenamiento un caldo o puré, ingerir después de las cenas una cucharada de bicarbonato, tomar un Omeoprazol el viernes para prevenir posibles molestias gástricas en carrera, o lo más importante, hacer la recarga de glucógeno, técnica que supongo ya todos conocéis, es decir, ingerir mayor cantidad de proteínas (carnes, pescados, lácteos) el lunes, martes y miércoles, y cargar más de hidratos (pasta, arroz, pan, patata cocida, etc) el jueves, viernes, y sábado. Ya no se lleva aquello de hacerlo de un modo drástico; ahora se practica de una forma más liviana, con lo que se evita cualquier efecto secundario. Yo calculo que la carga de proteínas la hago al 70% y la de hidratos al 85% aproximadamente. Además, durante los 3 últimos días me metí, por mi cuenta y riesgo, unas valerianas porque, extrañamente a lo que me suele suceder antes de cualquier competición, los nervios no me dejaban dormir. Creo que consiguieron su efecto. Los tomaba una hora antes de la cena y al acostarme me podía dormir con cierta facilidad. Sería un poco largo enumerar todos pasos que llevé a cabo y que aprendí, como digo, de ese fenomenal relato del Dr.Manuel Nájera. Aún se puede consultar en el Foro de Correr Asturias. Debería ser de consulta obligatoria para cualquier maratoniano, se ponga en práctica posteriormente o no.

Mi mujer y yo llegamos a la plaza de María Pita y empezamos a saludar a cantidad de gente. La representación asturiana fue muy numerosa, una gozada. Pronto encontré a los que iban a ser mis acompañantes: Manuel Lavayos y Servando. Con Manuel comparto equipo y entrenador, Rubén, quien nos había indicado idéntico ritmo para la carrera y colaboración mutua. Con Servando ya había hablado unos días antes de la carrera y afortunadamente para mí íbamos a hacer juntos al menos la primera vuelta de 14 kms, ya que coincidían exactamente nuestro ritmo inicial a 4:10; luego él tenía previsto hacer la 2ª vuelta 5 segundos más rápido y la 3ª a 4:00. Teóricamente, Manuel y yo teníamos que ir con ese 4:10 hasta el km 35. Mi otra gran sorpresa fue que también mi compañero Diego se apuntaba a nuestro carro, o nosotros al de él, que tanto monta monta tanto. Más tarde, ya en carrera, descubrí que Eduardo también nos acompañaba. La familia aumentaba, y esa, era otra buena noticia. Con lo del pie solucionado por el momento y con la confianza que me daba llevar a tan ilustres acompañantes, el panorama se me iba aclarando. Ya solo faltaba hacer los 42,2 kms (casi nada), pero el primer paso ya estaba dado. Justo antes de la salida tuve que deshacerme de un pelma de la organización que estaba empeñado en apartarme de mis compañeros porque en mi dorsal ponía que yo tenía que salir desde el cajón nº2 y yo estaba con ellos en el nº1. Al final se le dio esquinazo y asunto terminado. Y tras unas fotos en grupo que nos hizo Miguel, se dio el pistoletazo de salida que daba comienzo a mi segunda maratón.

Pronto se formó un pelotón bastante numeroso detrás de nosotros, y más concretamente detrás de Servando y Diego, que durante veintitantos kms fueron comandando el grupo. Ellos tiraron cuando el viento daba de lado, a favor o, lo peor, en contra. Las rachas en ciertos momentos eran realmente fuertes, sobre todo cuando coincidían al pasar por alguna bocacalle. La temperatura era la idónea, desde mi punto de vista, la lluvia no fue mucha, pero nos cayó una solemne granizada entre el km 9 y 10, que hizo maldecir en voz alta a unos cuántos maratonianos de los que nos acompañaban. Por lo que a mí respecta, iba pendiente de mis pulsaciones, que eran demasiado altas en ese momento. De llevar los ritmos se encargaban a la perfección Diego y Servando. No puedo decir que me encontrara funcionando bien. No sentía molestia de ningún tipo, algo rarísimo en mí, pero me faltaba el aire, no iba redondo. Notaba que iba un poco mejor que bastantes de los del grupo cuando llegaban las cuestas. Sentía la respiración forzada de la gente por detrás y yo me notaba bien. Acabamos esa 1ª vuelta a un ritmo medio de 4:06. Al comienzo de la 2ª vuelta pregunté a Servando y a Diego si iban a bajar esos 5 segundos en el ritmo, según lo que tenían previsto, y me contestaron con un sí rotundo. Iban muy bien. Le pregunté a Manuel qué le parecía si seguíamos con ellos y no me dijo ni sí ni no, tenía muchas dudas. El caso es que yo habría levantado el pie de buena gana, pero miraba para atrás y veía el siguiente pelotón demasiado lejos, preferí seguir ahí que luchar en tierra de nadie. Manuel fue durante unos cuántos kms más, bien colocado por detrás, pero llegó un momento en el que se descolgó. La primera gran putada.

En ese momento yo no iba mal, en realidad empecé a ir mejor. A partir del km 12 empecé a beber el primero de los 5 geles que me acabé tomando. Lo llevaba perfectamente planificado para empezar a tomarlos muy poco a poco 2 kms antes de cada avituallamiento, donde casi siempre bebía isotónica y un poco de agua. Como esto sucedía cada 5 kms aproximadamente, me mantenía hidratado, alimentado y muy entretenido.

A medida que pasaban los kms me iba animando cada vez más con el hecho de que íbamos aumentando el ritmo y mis pulsaciones, elevadas al principio, apenas habían subido una pulsación de media en veintitantos kms. Pero ahora sí que notaba que la maquinaria funcionaba a pleno rendimiento. Y en esto llegó el km 28, inicio de la 3ª y última vuelta. La 2ª vuelta repetimos el mismo ritmo medio que en la 1ª. Aproveché para dejarle a Miguel el cinturón, que representaba para mí un pequeño incordio, porque lo llevaba muy suelto, y ya empecé a dar la cara en el momento en el que Diego protestó, con toda la razón del mundo, ante el grupo porque estaban llevando entre Servando y él todo el peso de la carrera hasta ese momento y nadie les dábamos un relevo. Entonces, ambos se echaron un poco para atrás y algunos del pelotón cambiaron el ritmo y pusieron a todo el grupo en fila de a uno. Ahí se fue Servando, luego yo y detrás de mí Diego.

Desgraciadamente, se empezaba a abrir hueco entre Servando y yo, que iba tratando de que Diego no se descolgara, pero mi compañero había entregado ya todo lo que tenía y me dijo que no nos podía seguir. No sé qué pudo pasar aquí. A Diego le había visto correr con gran soltura, y no le había notado ningún síntoma de debilidad hasta ese momento. Todos sabemos que esos ritmos que llevábamos son prácticamente para él ritmo de calentamiento. Segunda gran putada.

Habían pasado para adelante, como dije, varios de los corredores que habían formado hasta entonces parte del grupo. Enlacé con Servando y me puse a tirar delante, tratando de que ahora él pudiera descansar detrás de mí. Y así fuimos pasando a varios corredores de los que se nos habían ido. Yo seguía fenomenal, consultaba cada poco el pulsómetro, que me ratificaba una y otra vez que la máquina seguía funcionando bien. Cada vez el ritmo era más alto, y sin embargo mis pulsaciones medias apenas subían. No recuerdo otro momento igual, ni siquiera entrenando. Servando me iba indicando el ritmo: baja un poco, tira ahora, ahí vas bien...

Llegando al km 37, me daba la sensación de que Servando se descolgaba, no sé si porque yo seguía incrementando el ritmo o porque él lo había bajado. Lógicamente regulé un poco, pero pronto me dijo que tirara. Era la señal, ya se lo había dejado claro a él y a Manuel Lavayos cuando calentábamos: si se dice ”tira”, se tira, y ya no hay más que hablar. En esos momentos ya no suelen quedar fuerzas para la discusión; ellos estaban totalmente de acuerdo con esta consigna. En realidad, esto lo había dicho con el convencimiento de que al que le iba a tocar decir “tira”, tanto a Manuel, como a Servando, y ya no digamos, a Diego, iba a ser yo. Así que, ante esta nueva situación, tiré a partir de ahí con lo que aún me quedaba dentro. Tendría que decir que esta fue la tercera gran…pero afortunadamente Servando consiguió el registro que para esta maratón había previsto sobre el papel. Con lo que no contaba era con el esfuerzo suplementario que tuvo que hacer por su lucha contra el viento y contra el perfil del recorrido. Su marca tiene un valor bastante mayor en una maratón en condiciones normales.

Soy de la opinión de que si guardas fuerzas para el final, vas a tener la posibilidad de decidir cómo las vas a administrar. En cambio, si esas energías las entregas antes, estarás condenado inevitablemente al sufrimiento. Pocas veces tuve la ocasión de poder llegar a este punto con reservas, quizás solo en mis dos maratones, y puedo asegurar que no conozco sensación más gratificante que ésta en la actividad del running. Fueron relativamente sencillos esos kilómetros hasta el 41, a pesar de correr con el aire en contra, que se hacía notar. Al llegar a ese punto, y como me seguían quedando fuerzas, traté de hacerlo a tope para rebajar algunos segundos al crono. Esos 1.200 m finales se me hicieron eternos. Me sentía lento, suponía que iba por encima de 4:00, quizás a 4:10 ó 4:15, ahora iba sufriendo, pero era obvio que no faltaba mucho. No alcanzaba a ver la zona de salida, por donde ya habíamos pasado 3 veces, y mi corazón, ahora sí, bombeaba con mucha intensidad. Poco a poco iba enfilando la recta donde empezaba a visualizar al fondo a la gente que esperaba la llegada de corredores cerca del arco de salida. Una vez a esa altura, solo faltarían 200m. A partir de aquí, solo tengo imágenes en forma de flashes, veo a bastante gente animando, creo ver a Celso saltando a la avenida, y a Marga y a Pedro aplaudiendo y gritando, y también veo que llego al final de la recta, donde hay una rotonda que por 4ª vez empiezo a bordear, y veo entonces saltar a mi mujer en medio del griterío de la gente que me indica que debo dar la vuelta y meterme para la plaza. Observo a toda la gente, incluida a una chica de la organización con un peto fosforito, marcándome el camino correcto, me lamento de los segundos perdidos y de que todavía me quedan bastantes metros para llegar. Vuelvo a coger velocidad y entrando en la plaza por fin veo al fondo la meta con el cronómetro de la carrera que indica 2h51 y unos cuantos segundos que iban subiendo. No quería que llegase a 2h52, era ya lo único por lo que todavía podía luchar. Después de superar los 42 km, ya solo quedaba hacer una de esas múltiples series cortas de 100m a las que me tuve que acostumbrar durante duros entrenamientos, cuando mis cuádriceps suplicaban descanso. Pero esta serie, con ser dura, era la más placentera. Cuando entrenamos puede hacer sol, puede llover, alguna vez nevar, hacer viento…pero, al contrario que en esta entrada en meta, nunca hay nadie aplaudiendo, y todo los sacrificios que hacemos a diario se ven recompensados en este efímero momento. Durante esta maratón me había acordado de muchos amigos por su vinculación a mi maratón de Barcelona, como p.ej. Manuel Nájera, Paco Cincor, Tony Torres, Paco Enlaze…En estos últimos metros me acordaba de lo que hace más de un año me había escrito Fernando Brevers en un correo, tal como ya expliqué en mi crónica de Barcelona: cuando llegues a meta levanta los brazos, has llegado. Recuerdo haber levantado los brazos y a continuación sentí cómo el cuerpo se relajaba de la tensión de la carrera, y posiblemente de los meses previos.



CONCLUSIONES

Estaba satisfecho por lo que había hecho, pero realmente, hasta que no llegué a casa, analicé los datos y los comparé con los de la maratón de Barcelona, no me di cuenta de todo lo que había avanzado en este último año, a pesar de todos los sinsabores de las lesiones.

Después de mis participaciones en estas dos maratones, reconociendo que esto no son matemáticas, y advirtiendo que ni siquiera los profesionales, ex-profesionales, expertos y demás familia del running se suelen poner de acuerdo, mantengo que en el maratón no existen ni hombres del mazo, ni muros ni nada que se le parezca, que lo que en realidad existe es un trabajo específico para afrontar este tipo de esfuerzo, que tiene que ir acompañada por una estrategia con unos ritmos de carrera que estén dentro de nuestras posibilidades y, además, que antes y durante la maratón deberemos estar convenientemente alimentado e hidratados si lo que queremos es acercarnos a nuestro mejor resultado posible. Si nos falla algo de esto, o bien fracasaremos o bien no lograremos alcanzar nuestro mejor rendimiento.

Sobre la maratón de La Coruña, decir que, suponiendo condiciones climatológicas normales, no me parece que sea rápida ni tampoco demasiado dura. Para ser la primera vez, no creo que haya estado mal atendida por parte de la organización, aunque p.ej. entiendo que esa llegada debería estar mejor controlada para que no se repita mi confusión ni la del ganador, al que según parece, le sucedió lo mismo. Opino que la Exporunning fue un pretexto para montar 3 tenderetes de marcas deportivas.

Aparte de los que estáis continuamente pendientes de mi estado a diario, quiero agradecer en especial a mi entrenador Rubén su interés constante y desinteresado por ayudarme a conseguir mis metas.


Y por último, no puedo dejar de reseñar mi otra gran alegría del día, y fue el debut de mi mujer en una prueba homologada como fue la carrera de 10.000 m que se hizo paralelamente a la maratón.



Mi más solemne admiración a los que tuvisteis la paciencia de leer esta crónica. Hay maratones en nuestra vida cotidiana a las que apenas se le da importancia; esta podría ser una de ellas.


Saltapraos
José Luis